La empresa orensana Lincbiotech, con sede en Tecnópole, lidera una iniciativa cuyo objetivo es encontrar un tratamiento para la covid-19. El proyecto, llamado “BioTICfinder”, busca atacar ciertas proteínas que componen el virus a través de aptámeros, esto es, unas secuencias de ADN que adoptan la forma de estructuras tridimensionales únicas, lo cual les permite reconocer un blanco específico con gran afinidad. Junto a Lincbiotech hay otras tres organizaciones que colaboran en este proyecto de investigación, todas ellas localizadas en Galicia: Televés (Santiago), Galchimia (Touro) y la Universidade de Santiago de Compostela (USC).
La parte principal del proyecto es la creación de un tratamiento que avance en la cura de la enfermedad una vez contraída. Según explica el CEO de la compañía ourensana, Juan Sebastián Ruiz, el proceso sería el siguiente: a los aptámeros creados en el laboratorio “se les añade una cola de un componente químico”. Posteriormente, éste añadido a la secuencia de ADN “estimula la capacidad de las células del cuerpo para degradar proteínas”. Ruiz explica que estos compuestos, que están siendo desarrollados como un antiviral, tienen tres partes: el aptámero, que por su afinidad se pega a esas proteínas; un linker, que sirve de nexo; y una molécula de ADN, que es la que da la señal de alerta a la célula de que tiene que eliminar ciertas proteínas.
Colaboración
En el nexo de unión entre aptámero y molécula, Lincbiotech está colaborando con Galchimia, que son los encargados de hacer “el análisis de calidad y el escalado industrial de los compuestos”. Por su parte, la colaboración con la USC consiste en “analizar cómo son los compuestos y ver cómo las tres partes partes -aptámero, proteína del virus y molécula de ADN- interactúan entre sí”. En resumen, “nuestro aptámero se pega a las proteínas del virus y, por distintas vías, avisa a las células que lo contienen o están próximas, para ordenarles que deben inutilizar ciertas proteínas sin las que el coronavirus no puede funcionar y acaba, por así decirlo, muriendo” -indica Ruiz-.
Hasta el momento, la única forma forma de combatir la covid de la que disponemos son las vacunas. “Aunque se haya demostrado que funcionan muy bien, es inevitable que haya infecciones que sigan necesitando hospitalización e incluso entrar en la UCI”, comenta Ruiz. Este tratamiento, que estaría disponible una vez se haya diagnosticado la covid, permitiría “tomártelo como si fuese una aspirina”.
La otra parte del proyecto tiene que ver con el diagnóstico. En esta otra vertiente, Lincbiotech colabora con la empresa compostelana Televés. Esta prueba se podría asemejar a una de antígenos como la actual, pero añadiría el componente de la tecnología. Este test, también basado en el principio de los aptámeros, permitiría detectar una infección de coronavirus a través de ciertas proteínas sin las que el virus no puede sobrevivir.
Fuente: La Región