Las pequeñas y medianas empresas son una figura clave del tejido económico español, tanto por su alta representación, el 97%, como por su trascendencia en el día a día. Este tipo de empresas ha tenido que adaptarse de forma inesperada a los cambios producidos por la Covid-19 con el objetivo de sobrevivir y sacar adelante el negocio. La forma de adaptarse ha sido la transformación digital.
Con motivo de analizar cómo se han adaptado las pequeñas y medianas empresas, GoDaddy ha publicado el Observatorio sobre digitalización de GoDaddy 2021: estudio sobre la madurez digital de las microempresas en España y Europa. Los datos del informe son resultado de encuestas a más de 5.100 empresas europeas de España, Alemania, Francia e Italia.
Algunos datos reveladores del informe indican que 7 de cada 10 empresas de Alemania, España e Italia ya tienen página web y/o presencia en las redes sociales. Y que el 78% de las pequeñas empresas españolas creen que los negocios más digitalizados podrán recuperarse mejor y crecer según vaya disminuyendo el impacto del Covid-19. Además, las pymes españolas se sitúan en primera posición en cuanto a creación y manejo de las redes sociales.
Un punto importante para conocer el nivel de madurez digital de las pymes españolas es analizar cómo han incorporado y aprovechado el uso de las tecnologías. El Observatorio sobre digitalización de GoDaddy 2021 ha incluido un digital index de las diferentes empresas europeas encuestadas. Con ello se ha podido establecer una clasificación sobre el nivel de digitalización. Se han tenido en cuenta variables como la continuidad, herramientas, sistemas utilizados, etc. De manera que se han podido establecer cuatro niveles: pioneras digitales, asentadas digitales, escépticas digitales e iniciadas digitales.
Las pymes españolas se sitúan a la cabeza de las empresas pioneras digitales, aunque es el país que menos negocios tiene digitalizados. El 28% de las pymes españolas son pioneras digitales, y el 26%, asentadas digitales, ya que tienen una buena infraestructura digital, aunque son reservadas en cuanto al marketing digital. En el medio se encuentran las iniciadas digitales, representando al 22%. En este nivel se sitúan aquellas que están convencidas de las ventajas de la digitalización, pero aún no están correctamente equipadas. Y, por último, los escépticos digitales con un 24%, que muestran un escaso compromiso.
En España, menos del 20% de las pymes están totalmente digitalizadas. Esto puede ser un problema a la hora de competir con empresas más grandes que cuentan con más recursos. Por ello, las subvenciones para la digitalización de las pymes son una gran ayuda para reducir esta brecha. Gracias al Plan de Digitalización de Pymes se realizará una inversión pública de fondos europeos de aproximadamente 5.000 millones de euros hasta 2023. Tiene como objetivo acelerar la digitalización de un millón y medio de pequeñas y medianas empresas, de las cuales alrededor del 80% son autónomos y microempresas.
Fuente: Cinco Días